Buscar este blog

domingo, 27 de abril de 2014

TOCINO DEL CIELO


El tocinillo de cielo es un tradicional postre elaborado fundamentalmente a base de yema de huevo y azúcar, una antigua receta que según la historia fue creado por las monjas del Convento de Espíritu Santo de Jerez de la Frontera.
También se lo vincula con la elaboración del vino cuando las claras eran utilizadas para clarificarlo y de allí que las yemas de huevos sobrantes eran entregadas a las monjas que para utilizarlas inventaron el tocinillo de cielo uno de los postres más antiguos de la repostería española, con un nombre que hace referencia tanto a su aspecto como textura y a su origen religioso. 



Ingredientes:
  • 5 Huevos (2 huevos enteros + 3 claras de huevo o 1 huevo entero y 4 claras). Opcional 
  • 125 gr. de azúcar + 3 cucharadas para el caramelo
  • 1 lima o limón para utilizar la mitad de su zumo y la media cascara o ralladura.
  •  100 ml. de agua
Caramelo
3 cucharadas de azúcar.
3 cucharadas de agua.


Procedimiento:
Lo primero que hacemos es precalentar el horno a 160º 
En una cazuela o al microondas preparamos un almibar con los 125 gr. de azúcar, el agua, el zumo y su cascara o ralladura o ambas.

Deja unos minutos que hierva el almibar y reserva, lo utilizaremos cuando ya esté prácticamente frió.

A continuación batimos los huevos y las yemas manualmente o con varillas eléctricas e incorporamos poco a poco el almibar.
En una cacerola ponemos el azúcar con un chorrito de agua y dejamos a fuego medio alto hasta que se vaya haciendo y tome un color tostado, no remover para que no se cristalice, una vez hecho lo colocamos en el molde que vayamos a utilizar.
Por último, vierte el huevo batido con el almíbar que has preparado encima del caramelo, coloca en una fuente o utensilio con agua para cocerlo al baño Maria, y llévalo al horno a 160º durante 40 minutos.
Ya solo queda, dejarlo enfriar, desmoldar y emplatar.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

SE PACIENTE CONTIGO MISMO.

  Ninguna herida sana sin dejar una cicatriz. Y hasta las heridas bien curadas vuelven a doler en algún momento. No te enojes! Solo lo hacen...